Published On:lunes, 27 de marzo de 2017
Posted by Cesar Martín
Posverdad, Absolutismo y Generalización
En esta ya no tan nueva sociedad de la que somos parte hay
que tener el mayor cuidado posible al momento de emitir opiniones. La
información está por todas partes y las verdades y mentiras pueden ser
rebatidas en lo que canta un gallo.
Usar absolutismos o generalizar no es para nada aconsejable.
No todo es bueno, pero no todo puede ser malo. No todos son sinceros pero no
todos pueden ser mentirosos. No todos son corruptos pero tampoco todos son
serios.
Escuchar o más bien leer a esos los cuales solo tienen cosas
malas para decir o escribir sobre una persona me hace dudar de la veracidad de
lo que comentan. Es cuesta arriba creer que exista sobre la faz de la tierra un
ser que lo haya hecho todo malo. Ni del mismo Rafael Leónidas Trujillo
podríamos decir eso, pese a sus treinta y un años de sangre y muerte alguna
acción positiva debió haber dejado para nuestro país.
Ensañarte contra una persona puede convertirte en un ser el
cual pierda la objetividad y llevarte incluso a pasar por alto detalles los
cuales darían perfecto balance o fuerza de verdad a tus planteamientos.
También se requiere entender que son muy pocas las verdades
absolutas, por no decir que no hay verdades absolutas, su verdad no será la
mía, cada quien tendrá la mentira que más le convenga.
Para todo en la vida debe existir un balance. Un balance que
permitirá a esto que llamamos mundo mantenerse por los tiempos y hacer de lo
que en nuestras manos tenemos, el valor que le demos.
Cuidado con esa Posverdad la cual no necesita de ninguna
prueba para ser cierta, solo se lleva de lo que dictan los sentimientos. Cuidado!